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Mostrando las entradas de 2008

2009 … ¿Vuelta de página?

La fotografía de la economía mundial hoy no es nada alentadora, ni mucho menos si se pretende mirar unos 6 meses o un año hacia adelante. La mayoría de las instituciones especializadas en crecimiento económico pronostican desde una recesión leve hasta una profunda y duradera, algunos pocos incluso, vaticinamos una nueva depresión. A partir del mes de agosto del presente año se empezaron a experimentar una serie de eventos que originaron posturas tan serias como una posible depresión. La quiebra de instituciones líderes en su campo, la nacionalización de entidades financieras y aseguradoras, nuevas adquisiciones, el congelamiento del crédito bancario, la parálisis del mercado de papel comercial, entre algunos otros aspectos, han minado la capacidad productiva a nivel global, dándole un giro a una economía que en muchos casos parecía ya haber tocado fondo. Esta situación es para nada despreciable, periodos como estos se caracterizan por agudos problemas de desempleo, dificultad e

El euro: ¿para dónde va?

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El ajuste a la baja que ha experimentado el Euro en poco más de un mes alcanza ya el 8,50%. ¿Qué se puede esperar ahora que el dólar está ganando terreno frente al euro? ¿Es esto una nueva tendencia o simplemente es un movimiento de corto plazo? ¿Un respiro en la apreciación del Euro? Estas, entre muchas otras, son las principales preguntas que muchos inversionistas se están -o están- haciendo. Las monedas guardan una relación muy cercana con las expectativas de tasas de interés, al igual que lo hacen la mayoría de los instrumentos de renta fija. Es así como estas se “mueven” previendo cambios en los diferenciales de tasas de interés entre diferentes monedas. ¿Cómo funciona esto? Pues bien, cuando las expectativas de tasas de interés son bajas en alguna economía en particular se presentan fugas de capital hacia otras con tasas mayores, esto por dos razones principalmente: Bajas tasas de interés se asocian a periodos de desaceleración económica, donde las principale

It's Short Time!

Esto no es una parte de esa canción que posiblemente todavía se escucha en algunas playas, a propósito de que algunos disfrutaron ya vacaciones a medio año, esto es un asunto muy serio, se trata del “short selling” o ventas en corto. Una venta en corto es un mecanismo que permite a los inversionistas realizar ganancias cuando el precio de algún subyacente cae, ¡sí!, así como lo lee, muchos inversionistas se benefician tanto cuando los mercados van al alza como cuando van a la baja. La noción básica de comprar cuando un subyacente va a subir de precio para luego venderlo a un precio mayor, es la forma más comúnmente utilizada en la mayoría de los mercados de bienes, la cual también se extiende al mercado de activos (bonos, acciones, entre otros). Cambiemos el panorama un poco, como haría usted para ganar dinero si analiza y llega a la conclusión de que, por ejemplo, va a caer el precio de un saco de arroz. Hagamos esto más fácil aún, usted tiene un amigo que tiene ya comprad

El rumor entre esquinas y avenidas

¡Y flotó! o más concretamente lo hizo flotar. Entre el 08 y 09 de mayo pasado vimos algo que, como ya habíamos comentado, era el desvelo de algunos y una fantasía para otros (incluido este servidor). Pero esta flotación no vino sola, vino acompañada de bombetas y algunos buenos lectores del mercado cambiario. L@s bombetas se hicieron oír, muy pocos pusieron los puntos sobre las ies, y lo peor del caso, fue que esta noticia fue cubierta más como un suceso que como un acontecimiento que empobrecía a la mayor parte de la población del país, tal como si esta situación fuera parte de un evento esperado para mejorar el bienestar de nuestra sociedad, ¿o sería acaso para mejorar el bienestar de un grupo en particular? Pues bien, muchas explicaciones han ido y venido, desde la parcializada visión del aumento del déficit de balanza comercial, donde se olvida el pequeño detalle de contemplar el superávit que la exportación de servicios implica para nuestra economía, hasta aquellos que

De ganas, paradigmas y parálisis ...

¿Quién no ha estado en una de esas situaciones en las que se quiere que suceda algo con tantas esperanzas que deja que esa situación -consciente o inconscientemente- nuble su sano juicio? En no pocas de estas ocasiones buscamos en los más pequeños detalles razones “de peso” para darnos más esperanzas, para justificar -si es el caso- la decisión tomada o la que no tomamos. Esto podríamos catalogarlo como parte de nuestra naturaleza, como una más de nuestras debilidades, sin embargo, a veces llegan a un nivel tan penoso que incluso caemos en el autoengaño, y después de un tiempo, pretendemos también engañar a aquellos que nos rodean. Una situación como esta es la que ha venido ocurriendo durante los últimos dos años en nuestro país con relación a la situación cambiaria, ¡y no es para menos!, el paradigma de que el tipo de cambio siempre debería subir encuentra justificación en un cuarto de siglo de minidevaluaciones. Solo para recordar, los paradigmas nos permiten aplicar una

Acciones y costos de la política monetaria

El día 22/Nov/07 el Banco Central de Costa Rica, BCCR, disminuyó el piso del Sistema de Bandas Cambiarias de ¢519,16 a ¢498,39, lo que provocó una apreciación de 4% del colón costarricense. Aunado a esto, el piso de la banda fue modificado para que disminuya 6 céntimos diarios y el techo de la banda dejó de aumentar 11 céntimos para hacerlo a ese mismo ritmo. La decisión del BCCR se dio después de varias semanas de que dicho ente dejara de intervenir en el mercado cambiario y tomó por sorpresa a la mayoría de los agentes económicos, ya que si bien este era un cambio percibido y discutido en el ámbito nacional, no se tenía a ciencia cierta un horizonte definido para su realización, lo que daba espacio para especular en cuánto a su implementación. Durante el año 2007 el Banco Central realizó compras en el mercado cambiario por un total de US$1,378,304 millones, mientras que en las primeras 10 semanas del año 2008 las compras que este ha realizado son por el monto de US$647,

Corto Plazo versus Largo Plazo, y algunas consideraciones de política monetaria

Si hay un concepto que está desvelando al mercado financiero y bursátil costarricense en las últimas semanas es el de corto plazo, e ineludiblemente, el de largo plazo, ¿Cuál es cuál? ¿Qué significa cada uno? ¿Cuánto dura uno y cuánto el otro? Estas y muchas otras preguntas han surgido después del recorte de 275 puntos base (2,75%) en las principales tasas de interés de referencia del Banco Central de Costa Rica, medida que ya habíamos mencionado se podría dar –aunque nos falló el espacio de la publicación- en la edición del pasado mes de Febrero. Solo para recordar, la principal razón para que el Banco Central baje las tasas de interés es desincentivar la entrada de mayores capitales desde el exterior -en dólares- evitando así mayores presiones a la baja en el tipo de cambio, a la vez -y esta es la razón de mayor peso- que disminuye las pérdidas financieras que le acarrea el diferencial de tasas más la apreciación del tipo de cambio, las cuales se hacen frente con emisió

Cambio estructural en tasas de interés y tipo de cambio

La relación existente entre la inflación, las tasas de interés y el tipo de cambio es sumamente estrecha y en tiempos como los actuales, donde los cambios en estas variables son la regla, es necesario tener presente dichas relaciones, para así tener claro cual es el panorama que podríamos prever. Recientemente la tasa básica pasiva bruta subió 0,25% para llegar a 7,25%, lo que ha suscitado nuevamente un debate que ya se consideraba superado, la posibilidad de que las tasas en colones volvieran a subir. En este punto hay que ser claro, nuestra economía ha experimentado lo que se conoce como un cambio estructural en tasas de interés y en tipos de cambio, lo que ha hecho que nuestro sistema financiero y bursátil se haya ajustado fuertemente, sin embargo, todavía se encuentran algunos participantes que añoran -y piden- volver a los antiguos niveles de estas variables, situación que dista mucho de ser probable. Tenemos que acostumbrarnos a los actuales niveles de tasas de

Derivados nuestros de cada día

Como es usual en cada inicio de año, empezamos con algunas buenas intensiones -y otras no tan buenas- con las cuales queremos corregir los yerros del pasado. Y no es para menos, el objetivo final de la mayoría de nosotros es pasar un buen año, ¡no fue por nada que surgió el clásico “feliz año nuevo”! Dentro de esa lista de buenas intensiones se puede agregar todo aquello que consideremos importante, sin embargo, hay un aspecto que será decisivo incluir para mejorar nuestros negocios, y este es el uso de derivados cambiarios. Más aún si usted o su empresa es generadora de dólares, puesto que las condiciones aún se mantienen para que el colón gane terreno frente al dólar, por lo que serían dichos generadores de dólares los más afectados por las eventuales apreciaciones del colón. Estos instrumentos han sido ajenos a nuestros mercados, pero ahora deberán convertirse en algo de cada día para cada uno de nosotros, si lo que buscamos es realizar una adecuada gestión del riesgo